Las predicciones y las apuestas para los premios Oscar mencionaban a ‘Robot Dreams‘, la última joya de la animación española. Aunque nadie se lo espera hasta que sucede. «En el momento en que recibimos la noticia pegamos un grito que nos oyeron hasta en Los Ángeles», confiesa el cineasta Pablo Berger en conversación con este diario tras descubrir su filme entre los nominados. El director bilbaíno aspira a la categoría de Mejor Película de Animación para la 96ª edición de los galardones más importantes del cine, que se entregarán el próximo 10 de marzo en Los Ángeles.
«Tengo una sonrisa permanente«, asegura el cineasta. «Estoy nervioso, pero voy a vivir un sueño. Todos los cineastas en algún momento de nuestra carrera hemos soñado con ser parte de la gala de los Oscar«, admite. La cinta, que está coproducida por la catalana Arcadia Motion Pictures y con el apoyo del Departament de Cultura de la Generalitat, es una adaptación de la novela gráfica homónima de Sara Varon. La película de animación explora la relación afectiva entre un perro, Dog, y un androide, Robot, en la Nueva York de los años 80. Una narración conmovedora sin diálogos, «un viaje emocional«, en palabras de su director, que habla de la amistad y la necesidad de encontrar almas gemelas.
Inicio exitoso en la animación
La primera nominación de Berger al Oscar llega de la mano de su debut en las películas de animación. «En cierta manera me siento como un director novel, pero, por otro lado, esta es mi cuarta película. Creo que todas las anteriores me prepararon para hacer esta«, desliza el director, que con esta cinta quería aportar al mundo de la animación «las interpretaciones». «He trabajado con muchos de los mejores actores del país, como Maribel Verdú y Javier Cámara, y he aprendido en el camino a distinguir buenas y sinceras interpretaciones. Quería traer al mundo de la animación personajes que actuasen de forma sincera«, detalla.
El cineasta revela que se enfrentó al proyecto «con mucho miedo«, aunque considera que esta emoción es «algo positivo». La experiencia ha sido tan satisfactoria que, aunque no sabe cuál va a ser su siguiente proyecto, está seguro de que en el futuro hará otra película de animación.
Sobre el proceso de producción de la película, el director explica que se dio cuenta de que «el mundo de la animación tenía más parecidos que diferencias con el mundo de la imagen real«. Mientras que en un rodaje se trabaja con actores de carne y hueso, en el mundo de la animación las ejecuciones las hace el equipo de animadores, pero la forma que tiene de comunicarse con los dos grupos es «muy similar». «En realidad un director de cine no sabe hacer de nada en concreto. Sabe un poquito de todo, pero sobre todo tiene que saber contar historias y distinguir entre una interpretación sincera y emotiva de una falsa y llena de mentiras«, expresa.
‘Robot dreams’ de Pablo Berger, la última joya de la animación española. EPC
Artesanía entre grandes producciones
‘Robot Dreams’ competirá en su categoría con ‘El chico y la garza’, ‘Elemental’, ‘Nimona’, y ‘Spider-Man: cruzando el multiverso’. Según Berger, comparada con las grandes películas de los grandes estudios de Hollywood, su punto fuerte es su artesanía: «La Academia ha pesado en incluir a un pequeño David a competir con los Goliat de las películas de animación de los grandes estudios«. Sin embargo, no está feliz por el reconocimiento personal de la nominación o «la palmadita en la espalda» a su ego, sino porque esta distinción será una manera de que más gente vaya a ver su película al cine.
‘Robot Dreams’ es una de las películas más aplaudidas del año y el pasado mes de diciembre fue elegida como mejor cinta de Animación en los Premios del Cine Europeo (EFA). También ha sido galardonada en el Festival Internacional de Annecy, los Premios Forqué y tiene tres nominaciones en los Premios Feroz y cuatro en los Premios Goya.