La hermandad del Prendimiento ha presentado este sábado en el Santuario de María Auxiliadora el diseño del que será el futuro techo de palio de su titular mariana, Nuestra Señora de la Piedad.
La obra ha sido diseñada por Julio Ferreira Gaspe, quien en su composición ha buscado «evocar como elemento principal la magnificencia que se aspiraba lograr en los palacios del siglo XVIII en Francia, erigiéndose como un refinado exponente de dicho periodo artístico». Según Francisco Javier Espejo, mayordomo de la cofradía salesiana, el diseño realizado por Ferreira «es capaz de mostrar y sintetizar la majestuosidad de la arquitectura y el arte decorativo donde se refleja la aspiración de crear un espacio que resplandezca como símbolo de la realeza de María».
Según la explicación de Espejo, el conjunto se encuentra enmarcado por un friso, elemento arquitectónico que se puede ver en algunos ejemplos del rococó francés. Dicho friso se ve enriquecido con distintos motivos decorativos vegetales que realzan el culto a la naturaleza tan presente en la mentalidad artística de la época. Asimismo, se pueden ver detalles de lacería que se entrelazan con los meandros, extendidos de manera simétrica en las secciones superior, inferior y laterales de la gloria central.
En la obra figuran también símbolos eucarísticos, como las espigas y uvas, que sirven «de recordatorio tangible de la presencia real de Cristo en la celebración eucarística», alineándose así con «la idea arquitectónica de concebir el techo de palio como un elemento sacramental por parte de Julio Ferreira, concepto al que también responde la tonalidad elegida para los fondos».
En este sentido, toda la ornamentación va sobre un fondo rojo de carácter simbólico, interpretándolo «como símbolo de la jerarquía celestial y realeza de María».
En la gloria del techo de palio figura una representación de la Inmaculada Concepción de Giambattista Tiepolo, que «como figura central refleja la importancia de la devoción en la Congregación Salesiana, destacando el énfasis en el pilar inmaculado y salvífico de María como materializa el sueño de las dos columnas de San Juan Bosco. Este enfoque resalta la significación de la pureza mariana en la tradición del carisma salesiano, evidenciando la iconografía inmaculista como parte integral del diseño».
En definitiva, el diseño del techo de palio de Nuestra Señora de la Piedad, a cargo de Julio Ferreira, va más allá «de la mera expresión estética del rococó, en el que cada detalle, desde la configuración estructural hasta la elección meticulosa de simbolismos, denota y evidencia el vínculo emocional tan arraigado en la devoción a María en el seno de nuestra hermandad».
En la actualidad, la hermandad tiene la bambalina frontal concluida y expuesta en la casa de hermandad; la pieza fue bordada por Francisco Pérez Artes, mientras que la bambalina trasera está en proceso de ejecución, en este caso en el taller del ecijano Jesús Rosado.