El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha reiterado este sábado las amenazas a Líbano, país que será «destruido» si el partido-milicia Hezbolá entra en guerra a gran escala con Israel.
«Vamos a restablecer la seguridad en el norte y en el sur. Si Hezbolá comete el error y entra en una guerra a gran escala habrá destruido Líbano con sus propias manos», ha afirmado Netanyahu en un discurso televisado.
«Estamos actuando en el norte contra todas las iniciativas de Hezbolá en nuestra contra. Estamos eliminando células terroristas, alejándolas de la frontera, destruyendo munición. Vamos a seguir con la fuerte disuasión en el norte y la victoria total en el sur», ha exlpicado.
En cuanto a la Franja de Gaza, Netanyahu ha defendido que la única forma de lograr el objetivo de destruir al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) es mediante la invasión terrestre del enclave y ha subrayado que la ofensiva continuará «hasta el final».
«Vamos a hacer todo lo posible para traer (a los rehenes) a casa, para completar la misión, pero también para destruir a Hamás y garantizar que Hamás no sea nunca más una amenaza para nosotros y que ningún grupo amenace a Israel desde Gaza», ha añadido.
«Lo digo simple y llanamente: vamos a seguir con la guerra hasta que consigamos todos nuestros objetivos (…). No hay forma de lograr esos objetivos que no sea ganando, no hay forma de ganar que no sea con una invasión terrestre», ha argumentado.
Netanyahu ha destacado que hasta el momento han sido liberados 110 rehenes, de los cuales 86 eran civiles israelíes, niños, mujeres y ancianos. «Lo pasé muy mal con la decisión, preguntándome cómo negociar con el demonio que asesina, secuestra y viola. Sin embargo, en ese mismo momento, supe que podríamos salvar docenas de vidas. Hemos recuperado a muchos, pero la misión aún no está completa», ha resaltado.
De hecho, Netanyahu ha denunciado que Hamás no permite al Comité Internacional de la Cruz Roja visitar a los rehenes como contemplaba el acuerdo de alto el fuego.
En cuanto a la postura de sus aliados, Netanyahu ha reconocido que «hay presión internacional», pero ha argumentado que ha conseguido el espacio necesario para que Israel prosiga hasta conseguir sus objetivos bélicos.
Netanyahu ha sido interrogado sobre la rueda de prensa celebrada también este sábado por el ministro de Defensa, Yoav Gallant, y ha revelado que propuso que fuera una comparecencia conjunta, pero éste lo rechazó.
En cuanto a la muerte de un civil israelí por disparos de un militar después de que el primero furstrara un ataque, Netanyahu ha lamentado este «trágico incidente», pero ha defendido que «más civiles con armas pueden ser salvadores en momentos como este».