Las medidas tomadas por el Gobierno en materia de restricción de importaciones se sienten en diversas áreas de la economía, entre ellas, las compañías de seguros. En este sentido, las aseguradoras ya están denunciando los inconvenientes que están teniendo como el faltante de repuestos importados para reparar los autos que las compañías deben cubrir.
Asi, las demoras en la reparación de los vehículos siniestrados, el encarecimiento de arreglos y de pólizas, las quejas de los asegurados y las dificultades para encontrar una salida a corto y mediano plazo conforman el impacto inicial de las medidas oficiales. “Todo esto se suma a otras dificultades que el sector ya venia sorteando en materia de costos, reaseguros y aumento de los casos de fraude”, explican en el mercado.
“La escasez de insumos importados afecta directamente a la industria del seguro, sobre todo en el ramo automotor. Al no contar con los repuestos correspondientes, no se puede hacer frente a la indemnización de nuestros asegurados en tiempo y forma. Esto provoca que se alarguen mucho los tiempos de respuesta, y cuando se encuentra el repuesto, al estar tan restringida la oferta, el precio es elevadísimo”, explica Juan Ignacio Perucchi, gerente general de Libra Seguros.
El nuevo cuadro de situación obliga a las compañías de seguros a reestructurar su funcionamiento. “Estamos llevando adelante presupuestos trimestrales de ingresos, ventas y erogaciones. Tendremos que seguir de cerca los cumplimientos de objetivos y la administración de los pasivos futuros. Además, consideramos que la situación se va a agravar por el aumento de la siniestralidad y de los índices inflacionarios”, consideró el directivo.
Perucchi estimó que la demora en conseguir algunos repuestos puede extenderse “entre cuatro o seis meses si es que se consiguen”, y admitió que “en ocasiones resulta imposible reparar el vehículo siniestrado”.
También el productor de seguros Agustin Fragola, de la Organización Kuschnir & Fragola, cuenta que últimamente “se está notando la falta de repuestos de vehículos debido al contexto actual, incluida la suba del dólar, el cepo a las importaciones y la alta inflación.
“ Los tiempos de las reparaciones se prolongaron. En consecuencia algunas compañías de seguros proponen indemnizar, acordando una suma dineraria con los asegurados, en lugar de hacerse cargo de la reparación el bien siniestrado”, comentó.
Gabriela Camacho, gerente de Autos en Integrity Seguros, agrega: «en este contexto y con tantos cambios, nos vimos en la necesidad de acortar vigencias de las pólizas a los fines de actualizar las sumas aseguradas y las tarifas con mayor periodicidad. También debimos recomendar a nuestros clientes que en forma permanente controlen las sumas aseguradas de sus pólizas y contraten cláusulas que ajusten para cubrir desvíos durante la vigencia de éstas y así poder estar protegidos ante un eventual siniestro.» sumó.
«Todo esto nos generó mayores costos operativos y una inversión en sistemas, pero entendimos que era el camino necesario para proteger el patrimonio de los asegurados ante estos tiempos de tanta incertidumbre», señaló la directiva.
Mientras intentan surfear con estas dificultades, las compañías mantienen contactos con las autoridades regulatorias y con las autoridades nacionales. “Siempre es importante que como industria nos situemos en un lugar de diálogo y consenso, pero con la firmeza que se necesita en estos casos. Se trata de una problemática común a toda la industria. Es un problema estructural que no está teniendo solución porque tiene un claro origen macroeconómico”, detalló el gerente general de Libra Seguros.