El dato de inflación de agosto de 4,2% fue más alto que el esperado por el mercado (3,9%) y el Gobierno (4%). Es verdad que fue por unas décimas pero en agosto la tasa tenía que “seguir bajando” y empezar con 3 para que sea una buena noticia. La inflación core hace tres meses que estaba arriba de 3,7% y en agosto subió a 4,1% porque alimentos dio un poco más alta (3,6%).
Hasta ahí la foto.
Ahora, dos comentarios.
Lo malo: le está costando bajar si tomamos en cuenta la promesa del Gobierno y el ancla del dólar del 2% mensual.
Lo bueno: es una inflación relativamente baja si se tiene que cuenta el importante ajuste de precios relativos que vienen ocurriendo durante todo 2024. En efecto, los primeros meses de 2024 la inflación estuvo traccionada por los sectores que venían “congelados”, como el dólar, alimentos y naftas; esta segunda etapa esta más traccionada por tarifas, servicios y salarios que tenían que hacer el “catch up”. Los servicios vienen con una inflación de 6,6% mensual hace 4 meses.
Mas allá del impasse de estos meses, creemos que la desinflación seguirá en los próximos meses.
¿Por qué?
Porque ayudaran los factores macro: el superávit fiscal, la menor cantidad de pesos y que -importante- ya queda poco del ajuste de tarifas (ya se hizo la mayor parte).
Obvio que sabemos que queda algo de brecha cambiaria (30%), pero gran parte de esta brecha ya está incluida en la inflación vía el impuestos País (el 17,5%, que ahora se bajó a 7,5%), por lo que una eventual salida del cepo y devaluación, tendría un impacto mas acotado que en el pasado. Sin ir mas lejos, la baja del impuesto País en septiembre ayudará a que este mes la inflación arranque con 3%.
Después de años de inflación acelerando en Argentina, lo más razonable es que preocupe la resistencia de bajar la tasa. Mas si es la principal promesa de campaña del actual gobierno. Una economía mas sana y sin perspectivas de crisis inminente, como vivimos en los últimos cinco años, también ayudarán a bajar un escalón mas la inflación.
Eso sí, no se deberá tomar atajos, mantener el superávit fiscal y seguir buscando liberar las restricciones cambiarias. El esfuerzo, dará sus frutos.
Fernando Marull
Bio completa