Pol Fernández se transformó en uno de los jugadores que quedaron marcados por el triunfo de Boca ante Palmeiras por las semifinales de la Copa Libertadores. Es que, además de mostrar un rendimiento regular, convirtió el penal decisivo de la tanda por penales que llevó a desatar el furor en todo el pueblo Xeneize y en sus compañeros.
El volante se transformó en un baluarte del equipo conducido por Jorge Almirón, siendo titular indiscutido y hasta portando la cinta de capitán en reiteradas ocasiones. En ese rol preponderante que ocupa en el plantel, Fernández habló con el Canal de Boca acerca de todo lo que dejó la sufrida definición por penales en el Allianz Parque.
«Nos juntamos en la arenga, primero que nada uno mira las caras de los compañeros y se siente quién está más confiado o no en esos momentos. Todos quieren aportar y está buenísimo y te da seguridad», rememoró el salido de las inferiores Xeneizes.
«En la tanda hoy en día se puede cambiar y me visualicé pateando el último y no sé por qué, en la marcha cuando patea el último de Palmeiras, me tocaba a mí; pero antes de ese penal me le acerco a Nico Figal y le digo ‘vas vos y yo cierro la tanda‘ porque me tenía mucha fe y sabía que no iba a errar. Venía de un traspié en la Bombonera (definición trunca contra Nacional) que no me gustó haberlo errado más allá de que pasamos», explicó Pol.
También se mostró contento de la seguridad que buscan transmitir sus compañeros: «Nico Valentini desde un principio se postuló. (Bruno) Valdez fue el primero que quiso patear, tenía muchas ganas y se sentía con mucha seguridad y eso es importante. Edinson (Cavani) ya sabía que iba a patear primero porque a él le gusta arrancar la tanda. Se dio así y estamos todos muy felices».
Además, le dedicó un segmento aparte para el rendimiento de Chiquito Romero: «Está teniendo un momento espectacular. Más allá de eso estamos todos muy contentos desde el último al primero, todos aportan y quieren estar, eso es importantísimo».
«Fue mi penal más importante»
Más allá de haber quedado en el recuerdo por ser el encargado de liquidar la serie con Palmeiras, Pol también llamó la atención debido a la manera en la que festejó su ejecución: con los brazos abiertos, clavado en el piso y mirando a los hinchas de Boca presentes que asistieron al estadio.
«Después del penal no se escuchaba nada, eran silbidos de todos lados. Cuando entró era solamente la gente de Boca gritar, sentía que me está abrazando con ellos, me salió festejar de esa manera. Sentía que estábamos gritando juntos, era una manera de estar conectados«, aclaró el mediocampista acerca de la razón de su celebración.
Y, claro está, catalogó el momento como «inolvidable» y el «penal más importante». «Va a quedar en mi mente y corazón para siempre. Por eso lo miré tanto, lo miré 70 veces y ahora lo miraré 7 veces más para quedar con el número», declaró Pol, haciendo juego con la séptima, número que los hinchas adjudican ver hasta en el más mínimo detalle.
La recuperación de su bajón futbolístico
A pesar de haber sido el encargado de definir la historia contra Palmeiras, Pol supo ser uno de los máximos apuntados por los hinchas cuando el rendimiento del equipo no era el esperado. Es por ello que el volante dio una explicación al respecto.
«Me costó mucho a principio de año, tuve problemas personales que me afectaron y traté de manejarlo con mi familia y que no me repercutiera, a veces no se puede. Hoy pude superarlo un poco y estoy más tranquilo», contó el ex Racing acerca de la razón a la que se debió su merma futbolística.
Y continuó: «Uno no busca transmitir las cosas malas que le pasan, fueron pérdidas muy importantes para mí pero me guían desde arriba y estoy muy contento con ellos».
Además, al momento de hablar de Boca, no dudó en destacar la figura de Juan Román Riquelme, tanto por su rol como dirigente como por el seguimiento que realiza sobre los jugadores: «Los dirigentes se han portado mil puntos, el Consejo y Román que ha estado en los momentos difíciles y no sale en todos lados y a nosotros nos gusta. Voy a estar agradecido siempre a él (Riquelme). Cuando me llamó por primera vez para volver no lo podía creer estaba muy contento y me sentía pleno, sabía que podía ayudar. Palabras de agradecimiento, estoy muy contento por lo que está haciendo por Boca».
También valoró los resultados que está otorgando su labor: «No es normal que a las inferiores, fútbol femenino y nosotros (primera masculina) le vaya tan bien, que las Copas que juegue sea juveniles o Primera División esté al 100 y compita, y es por culpa de él y de la gente que trajo al club para que trabajo. Contento y feliz con él porque sé que está 24/7 por el club como nadie, es una alegría verlo».
Por último, cerró: «Como es un año político se le pega de todos lados al club, pero no hay nada malo. Los chicos fueron campeones de América y jugaron la Intercontinental. El hincha de Boca está loco, pero feliz. La cuarta fue campeona, el femenino hoy (vs. Nacional por Libertadores femenina) hizo cinco goles, futbolísticamente el club está genial y va a estar mejor. No lo dudo porque hay gente que está las 24 horas para este escudo«.