El club flamante ascendido a Primera División informó la intervención ‘con éxito’ del futbolista, mientras que pidió castigo para José Matos, defensor del Burgos de España, quien confesó ser hostigado en redes sociales.
Giuliano Simeone, hijo del ‘Cholo’, ya mira al futuro. Después de la dura lesión que le tocó afrontar en el último partido de pretemporada con el Alavés, este lunes fue operado de la «fractura en el peroné y luxación de tobillo» de la pierna izquierda que sufrió ante el Burgos tras la entrada de José Matos, el defensor para quien se reclamó una suspensión de oficio y sufrió amenazas a través de las redes sociales.
Según informó el club de Vitoria, el delantero juvenil de 20 años «se sometió a una cirugía en la que se le realizó una osteosíntesis de peroné y una reconstrucción de los ligamentos de la sindesmosis por el doctor Mikel Sánchez».
«Toda la familia albiazul te desea una satisfactoria recuperación», agregó la institución a la que llegó cedido desde el Atlético Madrid, donde el DT es su papá Diego Pablo Simeone.
Además, el entrenador del Deportivo Alavés, Luis García Plaza, envió un mensaje de ánimo a Giuliano Simeone: «Mucha admiración por las personas que superan dificultades en la vida y se convierten en un faro en medio de la tormenta» y concluyó que el jugador será «uno de esos faros para el equipo».
A los pocos minutos que Giuliano fue trasladado al hospital, el Cholo visitó el centro médico para acompañar a su hijo y lo dejó expresado en una historia de su cuenta oficial de Instagram, en la que agradeció los mensajes de apoyo.
Disculpas y a la carga contra Matos
Iban 85 minutos cuando Simeone escapó por la banda derecha, la tiró larga y recibió la infracción de Matos que le produjo la lesión Inmediatamente, todos sus compañeros y rivales se tomaron la cabeza al darse cuenta de cómo había quedado el futbolista argentino.
El jugador del Burgos salió a pedir disculpas públicamente en sus redes sociales ante la acción de juego por la que se lo acusa de haberla generado intencionalmente.
«Lo siento de todo corazón, Giuliano. Sobra decir que, evidentemente, no es una entrada de manera intencionada, sino un lance del juego. Por mi experiencia jamás haría daño a ningún compañero de profesión«, escribió el zaguero de 28 años en el inicio de su mensaje.
Y luego aclaró el panorama de la situación en la que se encuentra. «Estoy recibiendo muchas amenazas que están fuera de lugar«, confesó quien supo ser jugador del Sevilla, y concluyó: «Mis más sinceras disculpas por lo ocurrido. Mucha fuerza y te deseo una pronta recuperación».
En su mayoría, los insultos recibidos proceden de aficionados del Alavés, institución que se prepara para realizar su regreso a la Primera División española.
El pedido del Alavés
El hijo del Cholo, nacido en Italia hace 20 años, había llegado como refuerzo del histórico Alavés para esta temporada, cedido desde el Atlético Madrid tras un fugaz paso por el Zaragoza, donde convirtió nueve goles en Segunda División.
El club anunció este lunes que solicitará a Instancias Federativas «que actúe de oficio ante los hechos ocurridos en el amistoso contra el Burgos».
Por este motivo la entidad vasca solicitó que la Federación Española de Fútbol actúe en consecuencia tras conocer el alcance de la lesión.