Mauro Icardi parece haber encontrado su lugar en el mundo. En Estambul, el delantero rosarino recuperó su olfato goleador y su mejor forma tras su paso poco feliz en París Saint Germain. Y este martes marcó un penal de lujo para el empate parcial del Galatasaray ante el Bayern Munich.
Por la tercera fecha del Grupo A de la Champions League, los alemanes visitaban el Rams Global Stadium, la casa del Galatasaray, mejor conocido como «el infierno de Estambul». A los 8 minutos, Kingsley Coman puso en ventaja al equipo bávaro.
Pero a la media hora de partido, el local contó con un penal y el encargado fue el goleador. Icardi se paró frente a la pelota y ante la mirada del arquero Sven Ulreich. Tomó carrera y engañó al guardavalla con un toque sutil al centro del arco.
A lo Panenka, a lo Abreu. Mauro Icardi marcó un golazo de penal. El segundo en su participación en la Champions League. El anterior lo había marcado en Old Trafford para el histórico 3-2 del equipo turco sobre el Manchester United.
Sin embargo, el conjunto dirigido por Thomas Tuchel logró imponerse por 3-1 por lo hecho en el segundo tiempo. La visita impuso su juego y su jerarquía y consiguió la ventaja a través de una definición de Harry Kane y otra de Jamal Musiala.