Luego de la destacada actuación que tuvo Julián Álvarez este martes, despachándose con un doblete para resurgir al vigente campeón Manchester City de un partido que corrió de atrás los primeros 45 minutos, y la presencia de Nahuel Molina con Atlético Madrid, la Champions League tuvo continuidad este miércoles, con futbolistas argentinos protagonistas, pero una floja jornada en cuanto a resultados.
Lautaro Martínez, el salvador de Inter
El partido moría con el marcador 1-0 abajo para el neroazurro, que debutaba en esta edición de Champions ante Real Sociedad con la intención de olvidar aquella final perdida ante Manchester City en la pasada temporada. Pero tuvo que correr de atrás durante 87 minutos, luego de que el equipo reciba un tanto a cuatro minutos de partido.
Es que en un intento de salida, la Real presionó al defensor que trasladó demás, le robaron el balón y Brais Méndez dio el golpe sobre la mesa ante el subcampeón, anotando rápidamente la ventaja parcial.
Tuvo que aparecer el capitán Lautaro Martínez para llevar tranquilidad a los hinchas del conjunto italiano, que sufrieron hasta el minuto 87 cuando el Toro anotó el empate definitivo.
Luego de intentar profundizar por la izquierda y mandar el centro, la jugada entró en un enredo, que se desató con la aparición de Lautaro por detrás de todo para definir de zurda, tras un pase cruzado que, en principio, parecía tener orden de disparo pero el balón fue impactado mal.
Lautaro festejó asi su gol 26 en 41 partidos disputados esta temporada. Además, suma seis goles en los últimos cinco partidos. Esta vez, luciendo la cinta de capitán y siendo el salvador de un Inter que necesitó de su goleador para no consumar una derrota merecida.
El Benfica de Otamendi y Di María cayó en su debut
Las Águilas habían quedado con la sensación de haber hecho una gran temporada la edición pasada. Y tiene con qué fundamentar: avanzó hasta cuartos de final, donde cayó con el subcampeón por 5-3 en el global. Pero ahora comenzó otra historia, y comenzó con el pie izquierdo.
Ya a los minutos el partido había dado la pauta de cómo sería el encuentro para el conjunto luso. Es que a los dos minutos tuvo un penal en contra, que luego terminó tirando por encima del travesaño Karim Konaté. Hasta ahí la suerte estaba de su lado, pero, a los pocos minutos, le tocó sufrir otro penal en contra.
El danés Alexander Bah tocó para atrás, la dejó corta y la agarró el delantero croata Roko Simic, que disparó frente al arquero pero llegó Nicolás Otamendi para tapar el remate. La pelota tomó un vuelo raro, pegó en el travesaño, y, con la duda de si entraba o no y el afán de querer sacarla, António Silva la tocó con la mano para que el arbitro dictamine un nuevo penal y el defensor sea expulsado.
En esta si. Simic no anduvo con rodeos y puso el 1-0 parcial. Ángel Di María fue protagonista, uno de los puntos altos del equipo intentando por tierra, aire, o como sea. De hecho, una de las más claras la tuvo desde el córner que se metía olímpico, si no lo impedía Alexander Schlager.
A los 51′ se acabaron las esperanzas, después de que el israelí Oscar Gluh anotó el 2-0 definitivo, y sentenció un arranque con sabor amargo en esta edición de Champions. El visitante, con Nicolás Capaldo en el banco de suplentes, se llevó una gran victoria en su visita al Benfica.
Noche oscura para Lisandro, Garnacho y el United, en su visita a Bayern Munich
Parecía guionado. Cada vez que el United lograba acercarse en el marcador, el Bayern sacaba una jugada y marcaba diferencias. Ese patrón se repitió durante los noventa minutos, hasta llegar al 4-3 definitivo que obtuvieron los alemanes ante el equipo rojo de Manchester.
Con Lisandro Martínez de titular, United estuvo detrás del marcador siempre. Primero 0-2 (Leroy Sané -con colaboración del arquero André Onana- y Serge Gnabry), ventaja que se repitió durante todo el encuentro.
Hojlund debutó en la red y Casemiro anotó doblete para el United. En Bayern completaron las estadísticas Harry Kane -de penal- y Mathys Tel, que había ingresado a los 86 minutos.
Alejandro Garnacho ingresó a los 80 minutos para intentar dar vuelta el encuentro, pero ya era tarde para el equipo entrenado por el neerlandés Erik Ten Hag, que por tercera vez consecutiva le anotan tres o más goles contando partidos de distintas competiciones.
Lucas Ocampos anotó en el empate de Sevilla
La localía y el gol de Lucas Ocampos no alcanzaron para obtener la victoria, a pesar de haberlo concretado a los nueve minutos de partido. En un centro desde la izquierda, el exjugador de River peinó y se le terminó metiendo por arriba al arquero francés Brice Samba.
A los 24 minutos de partido, el Lens de Francia consiguió el empate a través de Angel Fulgini.
Los otros argentinos que estuvieron fueron Erik Lamela, que fue titular, y Federico Gattoni, que estuvo en el banco de suplentes. Entre los ausentes estuvo Marcos Acuña, que no fue convocado.
Los focos estuvieron puestos en el regreso de Sergio Ramos con Sevilla a un partido de Champions, luego de su paso por Real Madrid y Paris Saint-Germain, donde fue compañero de Lionel Messi.
Además, Giovanni Simeone estuvo los últimos dos minutos en la victoria del Napoli, como visitante del Braga de Portugal (2-1), y el arquero argentino Walter Benítez sufrió la capacidad goleadora del Arsenal de Inglaterra, que venció 4-0 en Londres al PSV de Países Bajos.
Por el grupo A, Galatasaray, de Turquía, con el delantero argentino Mauro Icardi como titular, se recuperó sobre la hora y empató 2-2, de local, ante Copenhague, de Dinamarca, de tras ir perdiendo por dos goles de ventaja.