Con solo 6 años, Martí puso días atrás a su madre contra las cuerdas. «Biel y Bernat me han dicho a la hora del comedor que los Reyes son los padres; búscalo en el móvil«, dijo, enfadado, a la salida de la escuela. Tras tragar saliva, Alba respondió a su hijo mayor que no tenía que hacer caso de todo lo que le decían los niños en el cole. La respuesta no convenció a Martí, que insistió. «Bueno, pues pregúntaselo a ChatGPT, a ver qué dice». Sudor frío. «Si no tienes que creer todo lo que oyes en el cole, menos lo que dice ChatGPT«, intentó, rápida, esquivar la embestida. «Vale, pero pregúntaselo igualmente; las otras cosas que tú buscas sí te las crees». La madre sonrió y, por un instante, maldijo haber educado tan bien a su hijo.
Alba no está sola. Martí tampoco. Ni Biel ni Bernat. A lo evidente que siempre han resultado las tiendas abarrotadas cada diciembre, la gente acarreando bolsas y rollos de papel de regalo por las calles, los Papá Noel poco o nada logrados en los pasillos de los centros comerciales y los inoportunos comentarios de la tía abuela, a la magia de la Navidad se le ha sumado en los últimos años otro peligroso enemigo: saber que los padres tienen siempre un móvil en la mano en el que encuentran absolutamente todas las respuestas.
El Rey Melchor durante la cabalgata de Barcelona de la pasada Navidad. / JORDI OTIX
Pese a que hace ya un año, en diciembre de 2024, el comité de especialistas convocado por el Ministerio de Juventud e Infancia para trazar un plan de protección infantil digital recomendaba a los padres de los niños menores de 6 años no usar pantallas en su presencia, quien esté libre de culpa que tire la primera piedra. Alba, que es lo que se conoce como una madre presente, está siempre ahí, pero no es perfecta y, efectivamente, usa el móvil probablemente demasiado en presencia de Martí (y de su hermana menor, de 3 años), con lo que el pequeño sabe perfectamente que ese aparato es capaz de encontrar en cuestión de segundos desde la letra de la última canción de Aitana hasta la receta «fácil» para hacer sushi. ¡Cómo no va a saber lo de los Reyes!
La importancia del ‘prompt’
La parte positiva del dominio del móvil de esta madre millennial es que, rápida de reflejos, es conocedora de la importancia del ‘prompt’ (una instrucción en un programa de inteligencia artificial) y sabe hacerle a ChatGPT la pregunta correcta. «Hola, ChatGPT, soy Martí y tengo 6 años. En el cole me han dicho que los Reyes son los padres, ¿es verdad?».
El Rey Basaltar, durante la cabalgata de Barcelona en 2025. / Zowy Voeten
«Hola, Martí. Gracias por contármelo. Hay una cosa importante que debes saber: los Reyes Magos son una historia muy especial y mágica que se cuenta desde hace muchísimos años. A mucha gente le gusta vivirla como si fuera real, porque proporciona ilusión, alegría y ganas de compartir. También es verdad que los padres y las madres ayudan para que esa magia llegue a casa: preparan los regalos, escriben las notas y cuidan de que todo salga bien. Lo hacen porque quieren mucho a sus hijos y les encanta verles sonreír. Así que puedes pensar esto: ‘La magia de los Reyes existe porque hay personas que la hacen posible con cariño’. Si te sientes un poco confundido o triste por lo que te han dicho en el cole, eso es normal. Puedes hablarlo con tu familia cuando quieras«, responde en segundos ChatGPT.
Alba lee a su hijo, y a propósito, la respuesta en diagonal. Se salta la parte del «como si fuera real» y pone énfasis en que «la magia de los Reyes existe» y en que «a los padres les encanta ver sonreír a sus hijos».
Los expertos recomiendan hablar con los niños una vez descubren quién son los Reyes, entender su enfado y hacerles partícipes de la magia navideña para ‘proteger’ a los hermanos pequeños
Por este año, Alba convence a Martí, a quien tampoco le interesa demasiado seguir preguntando, y el curso que viene, ya con 7 años, ya verá cómo lo hace.
Otra cosa es cuando no es la madre (o el padre) quien media entre su hijo y ChatGPT, filtrando la pregunta y la respuesta, sino cuando es la propia criatura quien coge el móvil directamente. Sola. Sin filtros.
Peligros del consumo en soledad
Beatriz Martínez Núñez, psiquiatra Infantil y de la Adolescencia en el Hospital Niño Jesús de Madrid, señalaba en abril en este diario que «hay que preguntarse para qué utilizamos la tecnología porque tenemos muchos niños consumiendo pantallas en soledad y eso es muy peligroso».
El 12% de los niños de entre 0 y 4 años pasa más de dos horas diarias frente a pantallas, según la Encuesta de salud de España
Según los datos de la Encuesta de Salud de España de 2023, el uso de pantallas es significativo incluso entre los más pequeños, menores de 5 años: el 12% de los niños de entre 0 y 4 años pasa más de dos horas diarias frente a pantallas. Esta proporción se incrementa hasta cerca del 30% en el grupo de 5 a 9 años. Además de esa cuestión, parte muy importante del problema, la otra es si usan la tablet para mirar en TikTok vídeos de niños abriendo huevos Kinder sorpresa, para preguntarle a ChatGPT si los Reyes son los padres o para consumir pornografía (la edad media de acceso a contenidos sexuales es de 12 años y cada vez se realiza a una edad más temprana, iniciándose en algunos casos a los 8 años).
Lo confirmen en internet o por su prima mayor, una vez los niños tienen claro quiénes son en realidad los Reyes –algo que suele suceder entre los 7 y los 10 años–, los expertos recomiendan hablar con ellos, entender su posible enfado y hacerles partícipes de la magia navideña para alargar la ilusión y ‘proteger’ a los hermanos pequeños.
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