«Necesitan que no funcione Madrid». En una comparecencia de más de una hora, Isabel Díaz Ayuso ha presentado a la Comunidad de Madrid como «contrapeso a las políticas del Gobierno de la nación» y ha asumido abiertamente su papel de confrontación con Sánchez. «Es evidente que nos necesita para buscar un elemento con el que ir al choque ante tantos escándalos», ha señalado este miércoles desde la Real Casa de Correos, sede del Ejecutivo regional.
La presidenta madrileña ha comparecido tras la penúltima reunión del Consejo del Gobierno del año y en vísperas del debate en que se aprobarán los presupuestos regionales para 2026 en la Asamblea autonómica para hacer balance del año que concluye. En Sol se presume de haber llegado al final de 2025 con un 97% de las medidas del programa puestas en marcha y más de la mitad, hasta un 54%, ya ejecutadas. Entre ellas se destaca la reapertura de la Línea 7B de Metro o el inicio de las obras de la Ciudad de la Justicia. «Servicios públicos más cercanos y modernos», es el lema que se ha acuñado en el gabinete madrileño.
Comenzando por educación, ha repasado la actuación de los distintos departamentos en presencia de sus nueve consejeros, incluido el titular de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, quien se encuentra en proceso de recuperación de una enfermedad. «Somos un gobierno inconformista, apasionado y que trabaja con rigor y pundonor», ha señalado Ayuso. «Un gobierno extraño en estos tiempos», ha ironizado en referencia al Ejecutivo central porque «cumple su programa electoral», «aprueba Presupuestos» o «no alienta el boicot de eventos de interés público», ha enumerado entre sus argumentos. Particularmente ha enfatizado la aprobación de las cuentas regionales, «como es novedad en España», ha subrayado.
Durante su alocución, no obstante, ha señalado que todo ese trabajo se hace «muy complicado» cuando se tiene en frente al Gobierno de Sánchez «y al aparato del Estado». «Estamos hablando de 22 ministros, por cada consejero tocamos a dos y tres ministros que todos los días, en todo momento, cuando tienen la oportunidad, intentan deshacer el trabajo que estamos realizando», ha señalado. «El presidente del Gobierno, cada vez que tiene la oportunidad, en cualquier intervención, ya sea en el Congreso de los Diputados, ya sea en el extranjero, aprovecha un micrófono para desprestigiar la obra de la comunidad de Madrid en una clara obsesión», ha incidido.
Más allá, y al hilo de la polémica en torno al Hospital de Torrejón, Ayuso ha llegado a sugerir que desde el Gobierno se trata de hacer «reventar» la sanidad madrileña, también sus universidades, ha dicho, con fines electorales. «¿Por qué hay que poner de moda otra vez la cuestión del modelo sanitario de Madrid?», se ha preguntado. «Porque lo quieren reventar desde la Moncloa. Digámoslo claro, como lo quieren hacer con las universidades. Quieren reventar los servicios públicos para su pancarta en el 2026 y 2027», ha afirmado. «Y si por el medio se llevan al grupo Ribera, a cualquier hospital privado, a Quirón, a quien sea, no dudarán en hacerlo».
