cocina
Preparar rabas caseras es rápido y fácil: con pocos ingredientes y algunos pasos simples, lograrás calamares crujientes, tiernos y deliciosos para cualquier ocasión.
domingo, 19 de octubre de 2025 · 10:56
Ya sea como entrada, picada o plato principal, preparar rabas en casa es más fácil de lo que imaginás. Con pocos ingredientes y siguiendo algunos pasos clave, podés lograr unas rabas doradas, tiernas y crujientes que todos van a disfrutar.
Ingredientes (2 a 3 porciones)
- 500 g de calamares limpios (preferentemente tubos)
- 1 taza de harina común (0000)
- Sal y pimienta a gusto
- Limón (para acompañar)
- Aceite para freír (de girasol o mezcla)
Opcionales:
- Pimentón dulce o ají molido para saborizar la harina
- Huevo batido o soda para un rebozado más liviano
Paso 1: limpiar y cortar los calamares
Si no compraste los calamares ya limpios:
- Retirá la piel, el cartílago y los tentáculos. Solo usá los tubos.
- Cortalos en anillos de aproximadamente 1 cm de grosor.
- Lavá con agua fría y secá muy bien con papel de cocina: esto es clave para un rebozado crocante.
Paso 2: preparar el rebozado
- En un bowl o bolsa, mezclá la harina con sal, pimienta y las especias que quieras.
- Rebozá los anillos de calamar asegurándote de cubrirlos bien y sacudiendo el exceso de harina.
- Para un rebozado más liviano, podés pasar primero los anillos por huevo batido o soda y luego por harina.
Paso 3: freír las rabas
- Calentá abundante aceite en una sartén profunda o freidora, hasta que alcance unos 180 °C.
- Incorporá las rabas en tandas, evitando que se amontonen.
- Freí durante 1 a 2 minutos hasta que estén doradas. No las dejes demasiado tiempo, ya que pueden endurecerse.
- Retiralas con una espumadera y colocá sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Paso 4: servir
- Serví inmediatamente, acompañadas de rodajas de limón para exprimir al gusto.
- Opcionalmente, podés acompañarlas con mayonesa de ajo, alioli o salsa tártara.
Consejos clave
- Secá bien los calamares: el exceso de agua arruina el rebozado.
- Aceite bien caliente: si está frío, las rabas quedarán aceitosas.
- No freír en exceso: doradas ligeramente es suficiente para que queden tiernas.
- Rebozado a gusto: harina sola o combinada con huevo o soda para un resultado más aireado y liviano.