En la tarde del jueves, en barrio Granadero Pringles de la ciudad de Córdoba, ocurrió un hecho violento, que no debería perderse en el “ruido” informativo de la sobreexposición a la violencia con que los medios periodísticos abrumamos a nuestras audiencias.
Esa tarde una joven de 24 años circulaba en un vehículo Ford Fiesta, acompañada con dos jóvenes de 17 años y una de apenas 8 años.
En tal situación se hizo presente en el domicilio de una mujer de 23 años, de quien fue ex novia y, sin mediar palabra ni amenaza, procedió a disparar contra la vivienda.
La víctima del ataque, había realizado denuncia previa por lo que disponía de un botón antipánico que le fue asignado para su resguardo personal y resultó efectivo porque muy pronto después de accionarlo, se hizo presente un móvil policial, cuando aún la agresión estaba en proceso.
Apenas divisó el arribo de la policía, la agresora junto con sus acompañantes intentaron darse a la fuga y se originó una persecución
El Ford Fiesta en que se desplazaba la agresora
Foto: Policía de la Provincia de Córdoba
Estas personas intentaron fugarse por diversas arterias, siendo interceptadas en calles Av. Cornelio Saavedra y Ángel Gallardo. Allí el personal policial procedió a la aprehensión de la agresora y de una de las acompañantes de 17 años y también secuestró el Ford Fiesta en el que se movilizaban.
Además se encontró una pistola Bersa de calibre 0.22, con cartuchos y una vaina servida.
Las otras dos menores de edad, de 8 y 17 años, fueron entregadas a su padre, que se hizo presente para retirarlas.
Las detenidas fueron trasladadas a sede policial junto con lo incautado quedando a disposición de la justicia, que deberá decidir que delitos se le imputan a la agresora: ¿intentaba asesinarla o sólo amedrentarla?; ¿puede tipificarse como violencia de género, según la ley N° 26.485 de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres?