Hartos de «defectos» y «falsas promesas», los conductores australianos han decidido plantarse contra Tesla. El pasado mes de febrero presentaron una demanda ante Tribunal Federal de Australia y se espera que ahora, en julio, los abogados de la marca de Elon Musk emitan su defensa.
¿Qué es lo que ha llevado a 10.000 propietarios a demandar a Tesla? El hartazgo y, un poco, el miedo. Y es que el sistema Autopilot de la marca presenta problemas en una de sus funciones más importantes: la del frenado automático.
Frenada fantasma
Estos hechos no son una novedad y llevan siendo objeto de quejas e investigaciones en Estados Unidos desde hace tiempo. Algunos Teslas (y no pocos) con el Autopilot activado tienden a frenar repentinamente sin que haya ningún objeto, obstáculo o peligro delante del coche. Este fallo se ha bautizado como ‘frenada fantasma’.
Como ha explicado la abogada de JGA Saddler, el despacho que lleva la demanda colectiva en Australia, este fallo puede llegar a provocar un accidente mortal. Y no, no es una exageración.
Además de este problema, entre 2023 y 2024 millones de Teslas tuvieron que ser llamados a revisión por problemas o bien con la configuración de seguridad o bien por el Autopilot. Un caso sonado fue el de Jeremy Banner, que perdió la vida en un accidente de tráfico cuando el Autopilot de su Tesla Model S decidió pasar por debajo de un camión.
Más de 100.000 Teslas son el problema
La demanda también apunta a prestaciones de los modelos de Tesla que no cumplen con lo anunciado por la marca. Por ejemplo, la autonomía de la batería, que se queda en un 75% de las cifras prometidas.
Los vehículos que reúnen todos estos problemas y que han motivado la demanda colectiva son todos los Teslas vendidos en Australia desde mayo del 2021. Se estima que desde ese mes hasta finales de 2024, la marca de Elon Musk ha vendiddo unos 115.000 coches en el país.