Si hiciste click aquí, no ha sido por casualidad. Las cartas de hoy tienen un mensaje que tal vez necesites leer. Veamos cada una de ellas y luego el mensaje final.
El mensaje hace referencia a los ciclos naturales de la vida: nacer, morir, renacer, alegría, tristeza, abundancia, carencia, risa y llanto… las caras opuestas que en diferentes momentos la vida nos muestra. De cada situación hay que sacar un aprendizaje que nos permita evolucionar como personas, y saber de antemano que lo único permanente es el cambio. Nada se queda para siempre, todo cambia y se transforma. Quien puede decir que no ha pasado por situaciones dolorosas, o por momentos felices? A todos nos toca atravesar sufrimiento y también alegría. Cuando lo que toca vivir es doloroso hay que sacar fuerzas y seguir adelante porque esto pasará, eso dicen las cartas. Lo negativo se irá y vendrá una etapa luminosa de felicidad, éxitos y logros. Siempre hay un nuevo comienzo, una oportunidad para renacer. No hay que bajar los brazos, hay que sostener cada día la esperanza y tomar el aprendizaje que esa situación nos deja. La última carta, el patrimonio, trae la idea de valorar la herencia que nos han dejado los ancestros. La herencia no necesariamente consiste en bienes materiales, tambien heredamos de nuestros mayores una cultura, valores de amor y generosidad, testimonios de una vida honesta, en fin, muchas cosas que nos hacen ser quienes somos. La presencia de la carta del patrimonio, sugiere que el desconsuelo puede provenir de la pérdida de un ser querido. No hay manera de saltar el dolor, habrá que pasarlo, y luego pararse otra vez. La mejor manera de rendir homenaje a esa persona es tomando su legado como una valiosa joya que vivirá para siempre en nosotros y que compartiremos generosamente con otros.