Tomás Pérez, la promesa de Newells que llega al Inter de Milán en una venta histórica

La carrera de Tomás Pérez da un salto crucial: el volante central de Newell’s Old Boys, de 19 años, se va vendido al Inter de Milán, en una operación que rondaría los 7 millones de euros, más 2 millones en bonos por objetivos, principalmente ligados a las apariciones que cobrará en las próximas temporadas en el club italiano. Este traspaso marca un antes y un después en la carrera del juvenil, que apenas llevaba seis meses jugando en el primer equipo. Mientras tanto, el presidente del club de Rosario, Ignacio Astore, se encuentra en Italia no solo cerrando este acuerdo, sino también negociando la posible transferencia de Mateo Silvetti, otro talento Rojinegro.

Nacido el 14 de febrero de 2005, Tomás Pérez comenzó su camino en las divisiones juveniles de Newell’s, donde se destacó por su calidad técnica y visión de juego dentro de la cancha. Su debut se dio el año pasado, bajo las órdenes Sebastián Méndez, quien lo hizo entrar desde el banco, en un partido que terminó sin goles ante Independiente Rivadavia. Desde entonces, acumuló 18 partidos (13 desde el arranque) y terminó como titular indiscutido. En ese recorrido, convirtió un gol, en la derrota 4-1 ante Estudiantes de La Plata.

En una entrevista de hace unos meses con el diario La Capital de Rosario, Pérez destacó cómo su formación en la “Lepra” moldeó su estilo de juego: “Newell’s es mi casa. Aquí aprendí todo lo que sé y también entendí la importancia de dejarlo todo en cada partido”. Sus actuaciones no pasaron inadvertidas para los scouts europeos, y el Inter fue el más rápido en poner manos a la obra para asegurar su fichaje.

Con poca experiencia en primera, mostró ser un mediocampista de gran dinamismo, capaz de cumplir tanto funciones defensivas como ofensivas. Además, otro aspecto destacado es la seguridad con la que habla, similar a la ocasión que, con 4 años, le dijo al técnico que quería jugar en el medio, de 5, según declaró para La Capital.

Una anécdota que resalta en la entrevista es previa a su debut, en su primera convocatoria para viajar con la primera, de la mano del Gringo Heinze como entrenador: “Fue mi primer viaje en avión. Cuando llego al aeropuerto de Rosario me crucé a varios conocidos. Estaban yendo y viniendo del viaje a Bariloche. Eran chicos de mi edad y yo me estaba yendo a Santiago del Estero”. El famoso viaje a Bariloche fue una de las cosas que dejó de lado, por priorizar su carrera como profesional. “Mi mamá hizo igual el esfuerzo y pagó muchas cuotas del viaje. Yo tenía algo de ilusión y de ganas, porque iban mis amigos, aunque sabía que era muy difícil. Dos meses antes le dije a mi mamá que no siguiera pagando más. No pagues más. Por suerte le devolvieron algo de plata”, relató.

En el canal oficial del club, Tomás Pérez recordó sus inicios en el fútbol: “Yo jugaba en Malvinas con cinco o seis años y luego en Gimnasia de Rima, hasta que me vieron y me llamaron para hacer una prueba en Newell’s. Desde ahí, quedé y el resto es historia”. También evocó la figura de su abuelo, un español que llegó de niño a la Argentina, se hizo hincha de la Lepra y lo llevó por primera vez al actual estadio Marcelo Bielsa cuando apenas tenía tres años.“Ojalá que donde esté, lo esté disfrutando mucho y que se sienta orgulloso”, expresó con emoción.

En 2013, tuvo la oportunidad de ver, junto con su abuelo y primos, la campaña del famoso equipo campeón del Tata Martino. “Los que más me atraían eran Maxi (Rodríguez), Scocco, Lucas Bernardi. Me gustaba Pomelo (Mateo), por el tema que yo jugaba en ese puesto. También jugó ahí el Mudo Villalba. Los seguía, los miraba cómo jugaban. Cuando arranqué de chiquito, quise jugar en el medio, entonces veía lo que hacían ellos. Me encantaban”, sentenció.

Su entrenador de los 5 años lo apodó Mata. Y así lo siguen llamando hoy, tanto los compañeros y amigos. El primero que puso los ojos en ese flaco alto y de buena visión de juego fue Adrián Taffarel, exjugador de la Lepra y su técnico en la novena división. El mismo que cuando quedó a cargo de la reserva no dudó en promoverlo, aunque Tomás tuviera edad de séptima: “Así empecé en reserva, en 2022, con 16 años, y de titular. Siempre se lo agradezco”.

Fue el mismo Taffarel quien, en su primera convocatoria, declaró que en el futuro sería “el cinco titular de Newell’s”. Algo sabía.

“Mis padres hicieron todo para que yo pudiera dedicarme al fútbol. Mi sueño siempre fue llegar a Europa y poder devolverles algo de todo lo que me dieron”, decía Tomás Pérez en la entrevista del canal de Newell’s. “Me enseñaron a no rendirme, a esforzarme en cada entrenamiento y a ser humilde. Ellos son mi mayor apoyo en la vida”.

Todavía no está claro su futuro en el equipo italiano, liderado por Lautaro Martínez, donde firmará contrato por cuatro temporadas. Será evaluado por el cuerpo técnico de Simone Inzaghi, que ahora cuenta con cuatro argentinos en su plantilla- además del Toro y Tomás Pérez, están Joaquín Correa Y Tomás Palacios, ex Independiente Rivadavia. No obstante, según la La Gazzetta dello Sport, la idea parece ser invertir en su perfil no para el futuro inmediato, sino para el segundo equipo -el sub-23- que estructurará el Inter el año que viene. Tampoco descartan la posibilidad de que sea cedido a otro club europeo para ganar experiencia y minutos. Desde los medios de comunicación italianos, destacan su potencial, pero reconocen que su adaptación al fútbol europeo será clave para definir su futuro inmediato.

Mientras el pase de Pérez ya está cerrado, el presidente de Newell’s, Ignacio Astore, continua en Italia negociando con Javier Zanetti, encargado del aspecto deportivo del Inter, por Mateo Silvetti, otro juvenil Rojinegro de 19 años. Este mediapunta ofensivo también está en la mira del equipo italiano, que busca reforzar su cantera con talentos argentinos esta temporada. Las conversaciones están avanzadas, aunque el acuerdo final está complicado. A pedido del presidente de la Lepra, las negociaciones de ambos futbolistas se realizaron por separado.

Hace unos meses, el joven futbolista de futuro incierto decía: “Mi sueño, obviamente, es salir campeón con Newell’s. Quiero ser importante y protagonista para ayudar al club en todo lo que pueda”, para el canal de Newell’s.

Ya en los próximos días, Tomás Pérez aterrizará en Milán para pasar el examen médico con el Inter y convertirse oficialmente en nuevo jugador nerazzurro. El traspaso representa un hito, no solo para el jugador, sino también para el club, al convertirse en la segunda venta más cara en la historia de Newell’s, solo por detrás de Óscar Cardozo, vendido en casi 12 millones de euros al Benfica, según Transfermarkt. Supera incluso al ídolo Maxi Rodríguez, vendido en 6 millones al Real Español, en 2002.