El presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, expresó este domingo su disposición a acoger una posible reunión entre el próximo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el mandatario ruso, Vladímir Putin, tras el anuncio de Trump sobre su intención de organizar un encuentro con el líder ruso como parte de sus promesas para lograr la “paz” en Ucrania.
En una entrevista concedida a la cadena de televisión Pink, Vucic destacó que Serbia es un país independiente y no alineado con bloques militares como la OTAN o la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), lo que la convierte, según él, en un lugar ideal para garantizar la seguridad y neutralidad de ambos líderes.
“Somos independientes”, subrayó el presidente serbio.
“Serbia es el lugar más adecuado para este encuentro porque no solo está formalmente fuera de los bloques militares, sino que esencialmente es un país independiente y capaz de garantizar la plena seguridad de ambos presidentes”, declaró Vucic.
El mandatario serbio argumentó además que Serbia es un país donde tanto Trump como Putin gozan de un amplio apoyo popular.
“No hay un solo país que pueda compararse con Serbia en términos del nivel de apoyo a Trump”, señaló, añadiendo que, al mismo tiempo, Putin sigue siendo “muy, muy popular” entre la población serbia.
El anuncio de Vucic sigue a declaraciones previas de las autoridades rusas a finales de 2024, en las que indicaron que varios países ya se habían ofrecido para ser sede de un posible encuentro entre Trump y Putin. Aunque no se especificaron qué naciones estaban en consideración, líderes como el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, y el primer ministro eslovaco, Robert Fico, también habrían manifestado interés en acoger la reunión.
Serbia, pese a ser un país candidato a ingresar en la Unión Europea, mantiene estrechos lazos históricos y políticos con Rusia, lo que refuerza su posición como un potencial mediador neutral.
Durante su campaña electoral, Donald Trump prometió trabajar para poner fin al conflicto en Ucrania, afirmando que buscaría una negociación directa con Rusia. Tras su reciente victoria, confirmó que está organizando activamente una reunión con Putin para abordar la situación.
“Putin quiere reunirse. Lo ha dicho incluso públicamente, y tenemos que terminar con esta guerra. Es un desastre sangriento. Se están matando soldados”, afirmó Trump durante un encuentro con gobernadores republicanos en su residencia de Mar-a-Lago, Florida, la semana pasada.
Trump también dijo que su equipo “tiene mucha comunicación” con el presidente chino, Xi Jinping y que ha hablado con muchos líderes mundiales, pero que aún no lo ha hecho con Putin.
Además, ha asegurado que logrará un alto al fuego y llevará a la mesa de negociación tanto al líder del Kremlin, Vladimir Putin, como al presidente ucraniano, Volodimir Zelensky.
Bajo la administración del actual presidente demócrata, Joe Biden, Estados Unidos fue el principal aliado de Ucrania desde que comenzó la invasión rusa en febrero del 2022.
En este contexto, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, anunció un nuevo paquete de ayuda militar para Ucrania por valor de 500 millones de dólares. Esta podría ser la última entrega importante de apoyo militar de la administración de Joe Biden antes de que Trump asuma el cargo.
Si la reunión llegara a concretarse en territorio serbio, reforzaría el papel de Serbia como un actor clave en la diplomacia internacional, especialmente en un contexto de creciente polarización entre las grandes potencias globales.
Por ahora, no hay una fecha definida para este hipotético encuentro, aunque el ofrecimiento de Serbia como sede marca un paso adelante en los esfuerzos por facilitar una negociación entre las partes involucradas en el conflicto.
(Con información de EFE y Europa Press)